En los asuntos de la memoria,
existen las cronologías verosímiles ,las encubridoras
y las mentirosas.
En ellas deambulan Pasados
que cobraron reconocimientos inmerecidos
y brillos impensados.
A su lado, están los Presentes
que han perdido su encanto
y Futuros que eran capaces de encender el entusiasmo
con sólo pensarlos
y que ,vaya uno a saber por qué,
ya han perdido la mayor parte de su magia.
A estas escenas, es mejor no buscarlas enteras ni absolutas,
porque tienen por costumbre,
venir desparejas y en fragmento.
Están aquéllas en las que nos reconocemos airosos protagonistas,
junto a ésas en las que perdimos sin atenuantes.
Sin embargo,las que nos siguen doliendo
son otras.
Ësas que tuvimos por delante
y dejamos pasar
porque seguro que iba a haber tiempo,
más adelante.