Escrito por Eduardo M Romano el 27 agosto, 2015
Decía que no tenía intención
de caer nuevamente,
en las redundancias de siempre,
si es que por fin se decidía
a encarar una nueva relación amorosa.
Insistía en el hecho de que daría cualquier cosa
con tal de no verse
otra vez envuelta
en eso que ,(como si fuera una fatalidad que la perseguía),
no dejaba de repetirse en cada uno de sus vínculos.
Es decir : algo que empezaba como en un estado
de fascinación , para seguir luego
por una pendiente,
que seguro desembocaba
en alguna meseta plana y aburrida.
Que uno podía apostar,
sin temor a equivocarse,
que tenía por destino
terminar en el desencanto mutuo.
A esto le agregó,
con una voz ya menos audible,
parecida a un murmullo , y en tono de autocrítica,
unas frases bastante ambiguas.
Que aludían ,según recuerdo,
a expectativas desmesuradas,
y a cierta clase de ensueños
que se le disparaban.
Y no hacían otra cosa que
ubicarla fuera de eje y ponerla fuera de órbita.
Como si en cada principio,
hubiera tanta cosa propia
puesta por enfrente…
…que le impedía ver,
aunque más no fuera,
un poco más claro…
..a quién le había tocado
tener por delante.
489 Vistas
Deja una respuesta